EL GANADO BRAVO

María Vizcaíno - Niebla

El ganado bravo es una raza de toros y vacas que pastan en las dehesas y sirven para lidiar en la plaza de toros. Hay personas que piensan que en la plaza de toros no se deben celebrar corridas, pero si no se celebran, no es rentable criar el ganado bravo porque para que un toro alcance el peso adecuado tienen que pasar de tres a cinco año, por lo cual al ganadero no le sería rentable criarlo.

Por otra parte da muchísimos puestos de trabajo (mayorales, vaqueros, fabricas de pienso...) y conserva la naturaleza de la dehesa y la pequeña fauna salvaje que se cría en el campo .

Podéis consultar en algunas enciclopedias de tauromaquia y, para saber mas del toreo, no dudéis en ir a ver las corridas de toros que hay por toda Andalucía y si conoces a alguien que esté en contra del toreo, le dices que si ellos entendieran de toros lo dejarían en paz, porque el ganado bravo nació para morir luchando en la plaza, y si el toro pudiera hablar, díria: "dejadme en paz", como por ejemplo, la historia de Almanzito, que fue un toro indultado. Almancito fue un becerrito que luchaba por ser un toro bravo y al final lo consiguió, y volvió a pastar otra vez en la dehesa y aún sigue allí. Porque el toro bravo que embiste y es indultado, pasta en la dehesa hasta su muerte natural.

Además, un toro de lidia vive "como un rey" hasta que llega su hora de ir a la plaza: se pasa el día comiendo, en el campo, al aire libre. El ganadero los cuida mucho, les da mucho mimo... Si un toro no conoce bien a su dueño, lo embiste.